Navegando el Mekong (Parte I)
Publicado: Domingo, 22 de septiembre de 2013 -
9:50 pm En: Imagen, Diario de
Yucatán.
Por Jorge Luis Hidalgo Castellanos
Mi amigo Lucho había despertado muy temprano para preparar las cosas del
viaje. Si bien vivía en Phnom Penh, esa mañana haría también su primer viaje en
bote a Saigón y estaba muy animado. Era lógico, navegar el mítico Mekong es
algo que pocas veces se hace en la vida, a menos, claro está, que uno viva en
sus márgenes en alguno de los seis países que atraviesa.
Ese jueves de julio viajaríamos con sus dos pequeñas hijas (su esposa
trabajaría y nos alcanzaría en la noche en la ciudad de Ho Chi Minh –nombre
oficial de Saigón- por avión). Se nos había informado que en seis horas
estaríamos en la antigua capital de Viet Nam, después de haber recorrido una
parte del bajo Mekong y algunos kilómetros en autobús desde Chau Doc, ciudad
porteña vietnamita, destino final de nuestro bote de alta velocidad en el río. Mis vástagos estaban contentos de
compartir con las pequeñas de Lucho, amigos desde muy temprana edad.
A las 8 de la mañana, en el puerto fluvial de la capital camboyana, unos metros debajo de la avenida que recorre
el margen occidental del Mekong, adornada con la banderas de varios países,
sentíamos los oblicuos rayos del sol quemando nuestra piel mientras esperábamos
a que otros pasajeros –todos extranjeros- abordaran el “speed-boat”. Solo nosotros hablábamos español, aunque más tarde
arribaron unos jóvenes colombianos. El capitán anunció la salida y partimos
rumbo al sur, sobre las aguas de uno de los siete ríos más largos de Asia,
igual que lo han hecho durante milenios los habitantes de esta región del
mundo.
El Mekong es también uno de los ríos más largos del mundo, ocupa el
lugar 12 en dicha categoría, y el segundo con mayor biodiversidad, después del Amazonas en nuestra América. Bastan algunos ejemplos: un bagre de 2.5 m y la tortuga aplanada que habita ahí, para darse cuenta de la riqueza de su fauna. El río Mekong nace en las montañas del sureste de China bajando a través de la meseta oriental del Tíbet y la provincia de Yunnan hasta entrar a Myanmar. En su recorrido de 4,350 km hasta el Golfo de Tailandia atraviesa el territorio de seis países: China, Myanmar, Laos, Tailandia, Camboya y Viet Nam. Es una antigua y ocupada ruta comercial que une a China con el sureste asiático.
lugar 12 en dicha categoría, y el segundo con mayor biodiversidad, después del Amazonas en nuestra América. Bastan algunos ejemplos: un bagre de 2.5 m y la tortuga aplanada que habita ahí, para darse cuenta de la riqueza de su fauna. El río Mekong nace en las montañas del sureste de China bajando a través de la meseta oriental del Tíbet y la provincia de Yunnan hasta entrar a Myanmar. En su recorrido de 4,350 km hasta el Golfo de Tailandia atraviesa el territorio de seis países: China, Myanmar, Laos, Tailandia, Camboya y Viet Nam. Es una antigua y ocupada ruta comercial que une a China con el sureste asiático.
Navegando el Mekong sobre la cubierta del bote, bajo su toldo de lona y
con el viento en la cara, Lucho nos explicó que en Phnom Penh, donde nos
embarcamos, el Mekong encuentra otros dos ríos: el Tonlé Sap y el Bassac. El
primero es parte del sistema acuático del mayor lago de Camboya, localizado
entre la actual capital del reino y Siem Reap, en el noreste, cuna de los
templos de Angkor, lo que explica un fenómeno geográfico-físico que ocurre en la
capital camboyana. Cuando el Mekong está bajo, las aguas del Tonlé Sap entran
con fuerza en su cauce haciendo que la corriente vaya en una dirección mientras
que cuando el Mekong crece su corriente toma el camino normal hacia el sur. Es
decir, frente a la capital, las corrientes del río cambian dependiendo de su
volumen de agua. Eso nos entusiasmó todavía más y de manera involuntaria vimos
hacia atrás para admirar el afluente. Su color achocolatado dejaba ver que en
esa época del año la corriente va río abajo.
El Mekong forma, a lo largo de una extensión de 100 km, la frontera
natural entre Myanmar y Laos. Varios kilómetros más abajo, en otro punto, llega
a un lugar donde convergen las fronteras de estos dos países con Tailandia,
área conocida también como el Triángulo Dorado, donde también confluye otro río,
el Ruak, que delimita en el este la
frontera del reino tailandés con la república de Myanmar. A partir del vértice
fronterizo, hacia el suroeste el Mekong se convierte en la delimitación
fronteriza entre Tailandia y Laos para adentrarse en tierras laosianas por 400
km hasta volverse a convertir en frontera fluvial de los dos países a lo largo
de 850 km, pasando frente a Vientián, la capital de Laos para discurrir después
hacia el sur y penetrar el territorio camboyano. Existen algunos puentes
internacionales entre Laos y Tailandia, construidos por el gobierno de este
reino para facilitar el cruce de sus habitantes y mercancías.
Después de tres horas de viaje, el bote no parecía disminuir su velocidad, lo que nos inquietó un poco, pero unos minutos más tarde vimos que se
dirigió lestamente hacia el borde derecho del río y se detuvo en un pequeño muelle con una
bandera en colores azul y rojo con un símbolo en su centro. ¿Dónde estábamos? Continuará.H
Copyright 2013. Texto & Fotos: Hidalgo©
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